Volé



Volé desnuda después de  dejar
 ese momento convertido en espejismo
 donde tu delirio se convierte en poema
 recostando mis sueños sobre tu pecho
 y en mis entrañas todo lo anhelado
 del  fuego que extasiados sentimos
 en el  vaivén asíncrono de mis caderas
 volando sin  fuerzas dejé contigo
 el suspiro final  de mi piel no inmaculada
 de aquel momento en que entre mis piernas
 por breves minutos la muerte nos visitaba

2 comentarios:

  1. Es difícil no volar envuelta en las alas de tu erotismo mágico. Me he puesto el sombrero para poder quitármelo delante tuyo...Bravo amiga mía.

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  2. Esa "muerte" pequeña, como le dicen, siempre es también una pequeña poesía.
    Y esta gran poesía roza, sin duda, ese momento mágico del amor.
    Qué grande y sensual arte, Berenice!

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